Este fin de semana me tocó hacer 30 kilómetros y la cadencia fue de 159 pasos por minutos. Lejos de los 180 que los especialistas señalan como ideal para lograr tu máxima eficiencia con el mínimo desgaste muscular y articular al correr.
Si quieres saber cuál es tu cadencia, sal y cuenta tu cantidad de pasos en 30 segundos mientras corres. Multiplica ese número por dos.
A continuación tres ejercicios que pueden ayudar a mejorar esa cadencia hasta en un 5%.
Velocidad en bajada. Después de rodar suave haz cinco cambios de ritmo de 200 metros en descenso, Baja con fuerza y luego sube suave para recuperar.
Haz dos marcas, separadas unos 20 metros. Da el máximo número de zancadas posible entre las dos marcas, elevando los pies muy rápido como si te fueras a quemar. Repítelo cinco veces intentando hacer una zancada más cada vez.
Pisa debajo. En lugar de lanzar los pies adelante trata de apoyar justo debajo con cada zancada. Fíjate en la diferencia de tu zancada normal y la zancada corta y lanza la pierna bien atrás para impulsarte. Haz dos rectas de 20 metros, arrancando con tu zancada normal y haciéndola corta a partir de la mitad, y ocho rectas con zancada corta todo el tiempo.
Fuente: www.sportlife.es