Aunque en sus inicios los zapatos con placas de carbono se veían solo en los atletas élites del mundo, su positivo impacto en el rendimiento del corredor ha hecho que aficionados de buen nivel (no principiantes) lo usen cada vez más, pese a que sus costos suelen ser más elevados que los de zapatillas sin esta tecnología.
Todo este movimiento comenzó aproximadamente hace unos 10 años en los pies de los mejores maratonistas. En 2016, un selecto grupo de corredores de Nike comenzó a competir con prototipos de las que serían después las Vaporfly 4%.
“Ese modelo estableció el estándar para lo que se llamaría súper zapatillas, que ahora ofrecen casi todas las marcas: una mediasuela de perfiles altos hecha con espumas ligeras y suaves que devuelve la energía; una placa para proporcionar rigidez, estabilidad y propulsión; y una geometría en forma de balancín en lugar de plana para ayudarte a rodar más rápidamente a través de toda esa espuma”, señala Runners World en una investigación sobre el tema.
Estas placas son láminas rígidas y ligeras fabricadas a partir de fibra de carbono, un material conocido por su alta resistencia y bajo peso. Se integran en la entresuela con el objetivo de proporcionar una mayor eficiencia en la pisada.
Para minimizar costos y porque no todas las pisadas son iguales se pueden conseguir zapatos con placas de carbono completas, placas parciales, con varillas de fibra de carbono o incluso placas que permiten que la zapatilla se flexione en determinadas direcciones. También hay algunos modelos que incorporan placas hechas de algo distinto a la fibra de carbono.
Beneficios de los zapatos con placas de carbono:
- Mejora la eficiencia de la pisada al proporcionar un retorno de energía superior, lo que se traduce en una menor fatiga muscular y una mayor velocidad sostenida durante más tiempo.
- Por la rigidez de la placa ofrece una postura más estable. Esto reduce el riesgo de lesiones por sobrecarga.
- Las espumas de alta tecnología utilizadas en la entresuela complementan esa rigidez y brindan una combinación óptima de amortiguación y propulsión.
- Las placas ayudan a distribuir la presión de manera más uniforme a lo largo del pie.
¿Cómo funcionan?
Según una investigación publicada en Planeta Triatlón, las placas actúan como una palanca en el calzado. Durante la fase de despegue del pie, la placa se flexiona y luego regresa a su forma original, proporcionando un impulso adicional.
“Este mecanismo ayuda a los corredores a mantener una zancada más consistente y potente, especialmente en las etapas finales de una carrera de larga distancia como el maratón. El diseño curvado de muchas placas de carbono también contribuye a una transición más suave entre el talón y la punta del pie. Esta transición eficiente reduce el tiempo de contacto con el suelo y mejora la cadencia del corredor”, agrega.
En el tiempo se ha observado que los zapatos con placas de carbono han venido experimentando importantes cambios para bien de los corredores y de su bolsillo, por lo que no es difícil prever que las grandes marcas continuarán en el futuro invirtiendo en investigación, en desarrollo para crear materiales aún más ligeros y resistentes y en optimizar la integración de las placas de carbono con otros elementos, lo que podría hacer más accesible este calzado deportivo.
Facebook, X e Instagram: @42kilometros
Lee también:
Sifan Hassan ganó el maratón olímpico y emuló a Emil Zatopek
Sifan Hassan ganó el maratón olímpico y emuló a Emil Zatopek