Caracas.- Un momento muy duro vivieron este domingo cientos de corredores, cuando en el marco de un entrenamiento especial en la avenida Río de Janeiro, un hombre cayó y falleció, al parecer de un infarto fulminante.
La muerte de Francisco Malavé encendió una vez más las alertas entre los corredores, sobre la necesidad de chequearse con regularidad ante de acometer una actividad tan desgastante como correr.
Desconozco si Francisco lo hacía, pero es clave, fundamental, antes de decidir incursionar en esta apasionante actividad, un chequeo médico rutinario, que incluya un perfil 20, un electrocardiograma y una placa de tórax.
Dependiendo de la edad de la persona y si padeció o padece alguna patología subir un escalón y realizar su prueba de esfuerzo y hasta un eco del corazón.
Tal como lo escribí este domingo por @42kilometros, nos unimos al dolor de su familia, compañeros de su team @genteadventure y apasionados de las carreras. Una vez más, la vida demostró cuan efímera es. Paz a su alma.
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