Londres.- La etíope Amaz Ayana se proclamó hoy campeona del mundo de los 10.000 metros en los Mundiales de atletismo de Londres con una exhibición tan imponente que ridiculizó a sus compañeras de podio sacándoles más de media vuelta de ventaja.
Ayana, que corrió sola en cabeza desde el 4.000 y fue ampliando su ventaja progresivamente, completó los diez kilómetros en 30:16,32, casi un minuto menos de lo que registraron su compatriota Tirunesh Dibaba, plata con 31:02,69, y la keniana Agnes Tirop, que se colgó el bronce en 31:03,50.
Pocas veces se había visto en una justa mundial una superioridad tan abrumadora como la de la campeona olímpica en Río 2016. Menos en una prueba que acostumbra a ser muy táctica y en la que etíopes y kenianas suelen estar muy igualadas, reseñó DPA.
Ninguna pudo esta vez ni siquiera acercarse a Ayana, que en el último 400 dobló a infinidad de rivales, mientras observaba no de muy lejos cómo un poco más adelante a Dibaba, campeona mundial de la distancia en 2005, 2007 y 2013, y olímpica en Londres 2012, y Tirop batallaban por la segunda posición.
La campeona mundial no llegó a doblarlas. Pero tuvo que esperarlas durante casi un minuto para abrazarlas tras cruzar la meta.