Si hay un factor que cualquier deportista debe vigilar es evitar el sobreentrenamiento, lo que está relacionado con la baja de rendimiento y las lesiones. El insigne maratonista español Chema Martínez explica cómo saber si está cerca o incluso se ha llegado al sobreentrenamiento.
La falta de sueño y de apetito, al igual que el bajo estado de ánimo son indicadores que reflejan esa situación. Las ganas de comer significan que la preparación se está asimilando. De ocurrir lo contrario hay que estar alerta y siempre escuchar tu cuerpo.
Para saber si un entrenamiento se realiza correctamente, además de las sensaciones, conviene medir el nivel de pulsaciones. Una vez terminada una sesión vale tomarse las pulsaciones y hacerlo nuevamente un minuto después. Si las pulsaciones han caído al menos en 35 puntos se va por buen camino.
Cuando ese entrenamiento implica corridas hay que tener en cuenta que deben hacerse en progresivo. Comenzar siempre más lento. Si se está haciendo un trabajo de repeticiones de 10×1000, por ejemplo, es un error que los primeros sean más rápido que los últimos.
El método 10-10-10 está en esa dirección. Señala que al correr un maratón debe partirse en tres toletes: las primeras 10 millas (16 kilómetros) más lentas que las segundas 10 millas que deben hacerse al ritmo objetivo. Y los últimos 10 kilómetros deben ser lo más rápidos.
¿Cómo saber si el entrenamiento es excesivo? De acuerdo a Martínez hay un test bastante simple: siéntate por un minuto y levántate en forma violenta. Si las pulsaciones suben en más de 20 puntos significa que algo no está bien.
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