La vida está cargada de desafíos, de metas que uno se plantea y que a veces pueden parecer una locura. Pruebas que miden hasta dónde puede llegar el ser humano. El back to back o correr dos maratones en fines de semana seguidos estaba en mi mente desde hace años. Lo intenté en 2013 cuando hice el maratón de Santa Catarina (Brasil), pero una lesión no me permitió hacer el domingo siguiente el de Sao Paulo. Con la llegada de la COVID-19 y del auge de los maratones virtuales se hizo posible volver intentarlo. Y así lo hice junto con varios amigos en distintas partes del mundo. Fue una experiencia desgastante, pero maravillosa correr el 25 de octubre (Marines Corps) y el 1 de noviembre (NY). A pesar de que en el camino a veces lo obstáculos parecían infranqueables, el deseo de lucha por lograr un objetivo de vida termina imponiéndose y sirviendo como estímulo para que otros internalicen que pueden ir un paso más allá de sus límites.
Lenin Moya, Santiago de Chile: La complicidad del cuerpo y la mente
Me gusta calificar al back to back como la resiliencia del maratonista. Es la superación misma de los límites, donde hay que preparar y ejecutar un maratón, pero como si no fuera suficiente hacerlo dos domingos seguidos. Pareciera de locos pero una vez que se completa la sensación es maravillosa. Se convierte en un plus mejorar el tiempo del segundo. Es aquí cuando se conjugan en una complicidad el cuerpo y la mente para hacerlo una vez más y quizás mucho mejor. Te enfocas en superar 84 kilómetros en menos de 8 días. Es importante conocerse, poseer autocontrol mental y enfrentar el desafío en una forma muy positiva. Doy gracias a Dios y a todo el universo por los tres back to back que he logrado, pero sobre todo por los que vienen en el futuro.
Jesús González, Caracas: El maratón te reta y humilla
Cuando comenzó esta ola de los maratones virtuales mis compañeros Ramón Mena y Ernesto Linzalata me animaron para inscribirme en el Marine Corps. Acepté y pensé que sería una oportunidad única poder hacerlo en mi país. Eso me emocionaba mucho. A los dos días me invitaron a hacer el back to back con Nueva York. Dudé en hacerlo, porque un maratón te reta, humilla y nos lleva a poner la rodilla en tierra. Hacer dos maratones dos domingos seguidos era un doble reto. Al final acepté, porque ya en diciembre del año pasado fuimos pioneros en Venezuela en hacer un maratón virtual (Soy Maratonista).
Todo fue muy complicado porque en el camino me enfermé y estuve tres semanas sin poder entrenar. Cuando retomé mi preparación el domingo 4 de octubre me sentí tan mal que estuve a punto de bajarme del barco, pero también pensé que en los retos que nos presenta la vida no hay que abandonar sino hacer los ajustes para seguir. Con más fuerza en mi mente que en mis piernas culminé esta proeza. El maratón me puso en muchos momentos de rodilla, pero me levantaba y seguía. Estoy muy feliz de culminar esta locura.
Eduardo Medina, Caracas: En los tiempos difíciles oportunidades únicas
Este año 2020 arrancó con mucha ilusión porque me prepararía para correr en abril el maratón de Londres. En marzo nos sorprendió una pandemia y se pospusieron los compromisos. Ahora el viaje al Reino Unido sería en octubre. El coronavirus hizo que lo cancelaran en la modalidad presencial, pero apareció la posibilidad de hacerlo en forma virtual. Junto con Alex Graf vimos la oportunidad de medirnos en un reto de resistencia distinto: correr en los cuatro domingos de octubre cuatro maratones virtuales. De ese modo podríamos lograr hacer algo que en épocas normales hubiese sido imposible. Sería un «octubre rosa» en honor a las víctimas del cáncer, enfermedad con la que ambos lamentablemente hemos tenido que lidiar en nuestras familias.
Para afrontar el reto ya no sería importante el ritmo de carrera o el tiempo de culminación sino la recuperación entre semanas para continuar corriendo el domingo siguiente. Y así comenzó todo el 4 de octubre con Londres. Luego vino el Toronto Waterfront y el 18 hicimos Nueva York. En los tres las rutas fueron ajustándose y para NY decidimos correr la ruta CAF. Se trató de tercer maratón en 15 días y hacerlo en un trazado tan exigente nos hizo dudar de que podríamos recuperarnos para el siguiente, pues acusamos dolores musculares hasta el jueves.
Pero el domingo 25 salimos para el Marine Corps junto a otros siete compañeros del team Smart Runners que también lo corrieron en un circuito de 14 kilómetros desde SuperCable hasta Ciudad Banesco. Fue un mes inolvidable. Yo estaba mentalmente agotado y finalicé así mi mes de octubre. Alex sí tuvo la fortaleza e hizo este 1 de noviembre el Reto Impronta 42K. En los tiempos difíciles vemos oportunidades únicas. Nosotros muy contentos de nuestros logros con Alex haciendo cinco y yo cuatro maratones. Y esto lo que indica es que los límites los ponemos nosotros mismos.
Erika Navas, Estados Unidos: Usar el miedo como motor para lograr nuestro fin
Cuando me dijeron para hacer un back to back no sabía exactamente qué significaba. Confieso que me entró curiosidad saber cuán capaz era de poder hacerlo. También tenía mucho miedo del daño que le pudiera hacer a mi organismo. A medida que los meses pasaban y más se acercaba el momento, con dudas y confusión escogí la fecha en la que correría mi segundo maratón del año y mi sexto en la cuenta general. Por razones de logística decidí correrlo de noche. A las 12.30 de la madrugada terminé el de Nueva York.
Faltaba otro. Decidí ajustar la ruta y el horario. Con la experiencia anterior como aprendizaje no volvería a correr de noche. Todavía no creo de lo que podemos ser capaces, al atravesar la barrera del miedo y usarla como motor para nuestros propósitos. Ahora sé lo que es un back to back y queda seguir aprendiendo. Para lograrlo fueron fundamental el autocontrol y poder resistir, nunca desistir.
Abelardo Arasme, Caracas: Luchar por tus sueños
En esto de hacer maratones siempre me atacan los nervios y el back to back no ha sido la excepción. Fue un reto en el que me he cuidado mucho, más con una pandemia mundial, y donde he sido muy reservado, porque para muchos es llevar el cuerpo al límite y no todos están muy de acuerdo en correr dos maratones seguidos. Toda la logística la hice con un grupo pequeño de amigos que saben lo que es luchar por tus sueños. Inicialmente fue Marine Corps y luego vino el día del virtual de Nueva York, que salí a correr como si fuera mi primer maratón. Al pasar por el kilómetro 21 comencé a disfrutar y me dejé llevar hasta el final. Cuando crucé la meta lo primero que me vino a la mente es que todo lo que uno haga debe nacer del corazón y siempre buscar agradar a Dios, mi guía en todos estos desafíos.
Ramón Mena, Caracas: El cuerpo es una máquina maravillosa y perfecta
Correr un back to back, indistintamente de las veces que se haga, siempre será una de las mejores experiencias desafiantes, gratificantes, enriquecedoras y motivadoras vividas. Las razones son muchas: nos ayuda a conocer y a superar nuestros propios límites; nos lleva a aumentar el grado de motivación en los momentos más difíciles y a ser realistas en referencia a nuestras capacidades, y aprendemos muchas cosas sobre nosotros mismo, entre ellas, que los límites en ocasiones son mentales y que los temores más grandes nos invaden en los momentos en donde creemos no poder más.
Con este reto también descubrimos que el cuerpo es una máquina maravillosa y perfecta, que es capaz de superar tantas limitaciones, pero que siempre dependerá de tu mente, voluntad, fe y confianza que tengas en ti mismo. Sin dudas estas son herramientas que nos ayudarán en lo sucesivo a conquistar con éxito todas las metas que nos propongamos.
Es mi caso fue muy, muy especial, por ser la cuarta vez que lo hacía, por haber sido mi séptimo maratón del año 2020 y porque a su vez se convirtió en mi maratón número 60. Es decir, con este back to back logré superar mis propios límites para llegar a un nuevo punto de partida.
Lee también:
Noviembre llega con carreras de todas las distancias